Conozcamos del autismo
En México se ha realizado un estudio de prevalencia del autismo en el país, lo cual arrojó que 1 de cada 115 niños estarían en esta condición. Este estudio fue financiado por Autism Speaks y también demostró que la mayoría de los niños con alguna condición, ubicada dentro del espectro autista, fueron detectados en escuelas regulares, sin que nunca hubieran sido siquiera diagnosticados.
El trastorno del espectro autista (TEA) es una condición neurológica y de desarrollo que comienza en la niñez y dura toda la vida. Las personas con este trastorno tienen dificultades para interactuar con otras, para comunicarse y aprender. El síndrome de Asperger integra la categoría del TEA, es decir, es un tipo de Autismo.
Se le llama «trastorno de espectro» porque diferentes personas con TEA pueden tener una gran variedad de síntomas distintos. La mayoría puede tener problemas para mantener una conversación y es posible que no miren a los ojos cuando se les habla. Además, pueden tener intereses limitados y comportamientos repetitivos. Pueden pasar mucho tiempo ordenando cosas o repitiendo una frase una y otra vez, pareciera que están en su «propio mundo».
A pesar de la gama de posibles síntomas, hay ciertas acciones y conductas comunes en las personas con TEA, a continuación te describimos estos principales signos que se deben tomar en cuenta para saber si una persona padece este trastorno:
Comunicación
- No responde a su nombre a los 12 meses.
- No puede explicar lo que desea.
- No sigue las indicaciones.
- A veces parece oír, pero en ocasiones no.
- No señala o hace “adiós” con la mano.
- Solía decir unas pocas palabras o balbucear, pero ya no lo hace.
Conducta social
- No sonríe cuando alguien le sonríe.
- Hace poco contacto visual.
- Parece preferir jugar solo.
- Solamente toma cosas para sí mismo.
- Es muy independientes para su edad.
- Parece estar en su “propio mundo”.
- Parece no prestarle atención a la gente.
- No le interesan los demás niños.
- No señala objetos interesantes a los 14 meses.
- No trata de llamar la atención de sus padres.
Conducta estereotipada
- Parece “quedar estancado” haciendo lo mismo una y otra vez y no puede pasar a otra cosa.
- Muestra un apego inusual a los juguetes, los objetos o las rutinas (por ejemplo, sostener siempre una cuerda o tener que ponerse las medias antes que los pantalones).
- Pasa mucho tiempo poniendo cosas en un orden determinado en fila por ejemplo.
- Repite palabras o frases (a veces llamado ecolalia).
Otras conductas
- No juega a simular o a «hacer de cuenta» a los 18 meses.
- Tiene patrones de movimiento extraños.
- No sabe cómo jugar con juguetes.
- Camina en punta de pie.
- No le gusta treparse a las cosas o subir escaleras.
- No imita las caras o gestos.
- Parece estar mirando al vacío o deambular sin sentido.
- Hace rabietas (berrinches) intensas o violentas.
- Es demasiado activo, poco cooperador o resistente.
- Parece tener demasiada sensibilidad al ruido.
- No le gusta hamacarse o rebotar en las rodillas de los padres, etc.
Cada niño con autismo tiene necesidades diferentes, entre más pronto se identifiquen la señales más pronto se podrá dirigir a una programa de intervención temprana, el cual debe ser específico a los síntomas del niño.
Revisores de la información: Brenda Giselle Alvarez Rodriguez (Unidad de Investigación en Salud Pública) y Cassandra Saldaña Pineda (Unidad de Administración del Conocimiento).
Fuentes: MedlinePlus, American Academy of Pediatrics, National Institute of Child Health and Human Development, Instituto Aprendde.