Estudio evidencia que el lupus no es factor de riesgo del cáncer de mama.
El lupus eritematoso sistémico (LES) es una enfermedad inflamatoria crónica de causa desconocida. Ocurre cuando el sistema de defensa del cuerpo ataca las células y los tejidos sanos en lugar de los virus y las bacterias, causando daño en las articulaciones, la piel, los riñones, el corazón, los pulmones, los vasos sanguíneos y el cerebro.
Hay periodos en los que ‘brota’ la enfermedad y otros periodos en los que no se siente. Entre los síntomas que pueden aparecer se encuentran: dolor o inflamación en las articulaciones, dolor de los músculos, fiebre inexplicable, sarpullido enrojecido (por lo general en la cara), dolor de pecho al respirar profundamente, pérdida de cabello, dedos pálidos o morados de las manos o de los pies, sensibilidad al sol, hinchazón en las piernas o alrededor de los ojos, úlceras en la boca, hinchazón de las glándulas y cansancio. Los síntomas menos frecuentes que se pueden presentar son: anemia, dolor de cabeza, mareo, sentimientos de tristeza, confusión y convulsiones.
La prevalencia varía según el grupo de población, pero se estima que entre 300 y 400 personas por cada 100,000 habitantes la padecen. A cualquier persona le puede dar lupus, pero se presenta con mayor frecuencia en las mujeres. También se ha demostrado que es más común en ciertos grupos étnicos. Un factor que influye es la genética.
Recientemente se ha mejorado el diagnóstico, manejo y tratamiento del lupus, esto ha provocado que la tasa de supervivencia de los pacientes se eleve. Pero aún con esta mejora la esperanza de vida de las personas con esta enfermedad, sigue siendo menor que la de la población en general. Investigadores atribuyen este hecho a las demás enfermedades crónicas, mismas que una persona con lupus puede adquirir. Por ejemplo, aquellas que están relacionadas con el debilitamiento del sistema inmunológico, insuficiencia renal, enfermedad cardiovascular, enfermedad articular y varios tipos de cáncer.
Varios estudios consideran que las personas que padecen esta enfermedad tienen mayor riesgo de adquirir cáncer de mama. Sin embargo, un metanálisis (proceso mediante el que se analizan datos de diferentes estudios sobre el mismo tema y con la misma metodología), realizado para estimar la fuerza de asociación entre el lupus y el riesgo de incidencia de cáncer de mama, demostró que el cáncer de mama se presenta con la misma probabilidad en pacientes con lupus y la población en general.
En dicho estudio se analizaron subgrupos por tipo de estudio, etnia, años de seguimiento, tamaño de muestra y criterios de diagnóstico de lupus, pero tampoco se mostró ningún riesgo. El riesgo relativo agrupado de los 18 estudios analizados, fue de 1.012 (IC 95%, 0.797-1.284), con un valor I2 equivalente a 94.35% que indica una heterogeneidad sustancial. Con este metanálisis se concluyó que no hay una asociación directa entre el lupus eritematoso sistémico y el cáncer de mama.
Revisores de la información: Brenda Giselle Alvarez Rodriguez (Unidad de Investigación en Salud Pública) y Cassandra Saldaña Pineda (Unidad de Administración del Conocimiento).
Fuentes:
- Rezaleyazdi, Z., Tabaei, S., Ravanshad, y et al. Clin Rheumatoi (2018). No association between the risk of breast cancer and systemic lupus erythematosus: evidence from a meta-analysis.
- Ariza, K., Isaza, P., Gaviria, A. M., y et al. (2010). Calidad de vida relacionada con la salud, factores psicológicos y fisiopatológicos en pacientes con diagnóstico de Lupus Eritematoso Sistémico – LES. Terapia psicológica, 28(1), 27-36.
- MedlinePlus