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Las enfermedades cardiovasculares (ECV) son la principal causa de defunción en todo el mundo

Las enfermedades cardiovasculares (ECV) son la principal causa de defunción en todo el mundo

Según cifras de la Organización Mundial de la Salud, en 2015 murieron17,7 millones de personas a causa de alguna enfermedad cardiovascular (ECV), lo cual representa un 31% de todas las muertes registradas en el mundo. Las ECV son un conjunto de trastornos del corazón y de los vasos sanguíneos. Éstas se pueden clasificar en: hipertensión arterial (presión alta), cardiopatía coronaria (infarto de miocardio), enfermedad cerebrovascular (apoplejía), enfermedad vascular periférica, insuficiencia cardiaca, cardiopatía reumática, cardiopatía congénita y miocardiopatías.

La contaminación del aire, es el factor de riesgo ambiental más importante que contribuye a estas enfermedades. Las partículas finas <2.5 μm (PM 2.5) o ambiente PM 2.5, representa una gran amenaza para la salud pública, las elevaciones a corto plazo puede aumentar el riesgo relativo de eventos de discapacidad cardiovascular agudos en 1% a 3% en pocos días.

Más del 90% de la masa contaminante en la mezcla que respiramos en entornos urbanos proviene de gases o compuestos en fase de vapor, incluidos los carbonos orgánicos volátiles (que son liberados por la quema de combustibles, como gasolina, madera, carbón o gas natural.). El ozono es el contaminante secundario más prevalente, además de una serie de ácidos orgánicos e inorgánicos, y compuestos orgánicos volátiles y semivolables que se encuentran tanto en la fase gaseosa como en la de partículas.

Las series temporales y los estudios de casos cruzados en todo el mundo han explorado la asociación entre los cambios a corto plazo en la contaminación del aire y los cambios diarios en el Infarto al Miocardio (IM).  Una revisión sistemática y un metanálisis de estudios sobre exposiciones a corto plazo a la contaminación del aire y el IM mostraron que la PM 2.5 , junto con el dióxido de nitrógeno (NO 2 ) y el dióxido de azufre y el monóxido de carbono se asociaron con un mayor riesgo de IM.

En una revisión sistemática y un metanálisis de 94 estudios hasta 2014, en 28 países, un aumento de 10 μg / m 3 en la concentración de PM 2.5 y PM 10 se asoció con un aumento del 1% en el riesgo relativo de ingreso en el hospital con accidente cerebrovascular y mortalidad por accidente cerebrovascular. Además vivir cerca de la carretera y la pobreza parece estar asociado con la apoplejía isquémica y la severidad de la apoplejía.

La asociación entre la contaminación del aire y la hipertensión también ha sido revisada, ha sido objeto de al menos 4 metanálisis recientes, en los cuales han resultado incrementos en la PM ambiente 2.5 por 10 μg / m 3 asociados sistemáticamente con elevaciones de 1 a 3 mm Hg en la presión arterial sistólica y diastólica durante los siguientes días. Las exposiciones a más largo plazo se han relacionado con elevaciones crónicas de la presión arterial y con una mayor prevalencia o incidencia de hipertensión en muchos estudios también.

La aplicación legal, respaldada por tecnología, objetivos y cronogramas, es importante y puede ser más deficiente en países donde el control de la contaminación del aire es más necesario. Investigadores y proveedores de atención médica han desarrollado manuales para disminuir la exposición al aire contaminado y mejorar biomarcadores de la salud cardiometabólica.

Un método prometedor y relativamente barato es el uso de purificadores de aire de interiores portátiles. Los filtros de aire portátiles pueden reducir los niveles de PM 2.5 en interiores en >50% y se ha comprobado que mejoran una lista creciente de puntos finales sustitutos, que incluyen presión arterial, sensibilidad a la insulina, marcadores inflamatorios, hormonas del estrés y perfiles metabolómicos

En la actualidad, las estrategias de protección personal tienen la limitación de que ningún ensayo ha demostrado aún que reduce los eventos clínicos de ECV. Para ello se hace un llamado a la comunidad científica y de atención de la salud mundial, para sugerir que ha llegado el momento de probar formalmente los beneficios de estos enfoques en los ensayos de resultados y pensar en el futuro, en las condiciones ambientales de todo el mundo.

 

Revisores de la información: Brenda Giselle Alvarez Rodriguez (Unidad de Investigación en Salud Pública) y Cassandra Saldaña Pineda (Unidad de Administración del Conocimiento).

Fuentes:

  • Artículo: “Air Pollution and Cardiovascular Disease”. JACC (Journal of the American College of Cardiology), 2018-10-23, Volume 72, Issue 17, Pages 2054-2070. American College of Cardiology Foundation
  • Organización Mundial de la Salud.