Cirugía bariátrica no garantiza una mejor calidad de vida de la salud mental
Las cirugías para adelgazar puede ser una opción para las personas con obesidad extrema que quieran bajar de peso. Existen diferentes tipos, todas ellas suelen limitar la cantidad de alimentos que se ingieren, algunas también afectan cómo se digieren los alimentos y se absorben nutrientes. Pero en ninguna se está exento de los riesgos y complicaciones, que pueden ser infecciones, hernias y coágulos de sangre.
El baipás gástrico es el tipo de cirugía más frecuente para adelgazar, en ésta se hacen cambios quirúrgicos en el estómago y el aparato digestivo que limitan la cantidad de alimentos que se pueden comer y de nutrientes que se absorben. Como todas las cirugías, tiene riesgos y efectos secundarios considerables. El éxito del baipás gástrico depende de la capacidad con que se hagan cambios permanentes en el estilo de vida.
Si una persona desea someterse a esta cirugía, es necesario que cumpla con ciertas pautas médicas. Es un largo proceso de análisis el que debe realizarse, por lo general, lo realiza un equipo conformado por un médico, un dietista, un psicólogo y un cirujano, esto con el objeto de determinar si la persona es apta. El baipás gástrico puede ser una opción para los siguientes casos:
- Si los esfuerzos para adelgazar con dieta y ejercicio no fueron exitosos.
- Si tu índice de masa corporal (IMC) es de 40 o más.
- Si tu índice de masa corporal es de 35 o más y padeces un problema de salud grave relacionado con el peso, como diabetes de tipo 2, presión arterial alta o apnea del sueño grave.
- Si eres un adolescente que pasó por la pubertad, el índice de masa corporal es de 35 o más y padeces problemas de salud graves relacionados con la obesidad, como diabetes de tipo 2 o apnea del sueño grave.
Investigaciones se han enfocado en determinar el riesgo de eventos psiquiátricos adversos entre los pacientes de cirugía bariátrica. A pesar de las mejoras de salud después de esta cirugía tales como la diabetes tipo 2, la hipertensión y la dislipidemia, se han mostrado inquietudes acerca de los posibles riesgos continuos de trastornos de salud mental, como el abuso de sustancias, autolesiones y suicidio. Estudios observacionales basados en la población han identificado un mayor riesgo de suicidio y autolesión entre los pacientes que se sometieron a una cirugía, en comparación con los individuos no tratados quirúrgicamente y la población general.
Una revisión sistemática y un metanálisis de 11 ensayos clínicos aleatorios que compararon tratamientos quirúrgicos y no quirúrgicos y evaluó la calidad de vida de la salud mental, incluyó bases de datos hasta marzo de 2018, y demostró que no hay mejoría en la calidad de vida de la salud mental de los pacientes a corto o largo plazo, esto en comparación con el tratamiento no quirúrgico de la obesidad. Además, no se encontró diferencia en la incidencia acumulada de episodios depresivos entre ambos grupos de pacientes (con tratamientos quirúrgicos y no quirúrgicos).
Los hallazgos en los estudios observacionales respaldan la falta de mejoría en la calidad de vida de la salud mental en pacientes después de la cirugía, en comparación con el manejo no quirúrgico. Las personas que eligen someterse al baipás gástrico tienen un mayor riesgo de presentar eventos suicidas que las que deciden seguir un tratamiento no quirúrgico. La cirugía en sí aumenta este riesgo, ya que no es protectora en comparación del tratamiento no quirúrgico.
Diversos problemas postoperatorios pueden surgir, como dificultad para controlar el dolor (lo cual conduce al abuso de sustancias), complicaciones que requieren tratamientos adicionales, insatisfacción con la pérdida de peso, recuperación de peso, exceso de piel y/o cicatrización, entre otros; y estos pueden dar resultados adversos para la salud mental.
Otras dos revisiones sistemáticas principales sobre este tema informaron que las mejoras en la calidad de vida física fueron significativamente mayores después de la cirugía bariátrica que las mejoras en la calidad de vida mental y que un mayor enfoque en la promoción del bienestar psicológico después de la cirugía puede mejorar el pronóstico de estos pacientes.
La cirugía de baipás gástrico no es un procedimiento milagroso y no cualquier persona es apta para realizársela. Ni ésta ni otras cirugías para adelgazar garantizan que una persona vaya a perder todo el exceso de peso, ni que lo mantenga a largo plazo. Tampoco son una manera de evitar los cambios que se deben hacer en la dieta y los hábitos de ejercicio. Someterse a este tipo de cirugía implica cambiar hábitos y mejorar el estilo de vida, de lo contrario se puede volver a aumentar el peso perdido en la cirugía. Es necesario revisar con su médico las opciones y considerar si cumple con las pautas necesarias.
Revisores de la información: Cassandra Saldaña Pineda (Unidad de Administración del Conocimiento) y Brenda Giselle Alvarez Rodriguez (Unidad de Investigación en Salud Pública).
Fuentes:
- MayoClinic
- MedlinePlus
- Artículo: “Mental health quality of life after bariatric surgery: A systematic review and meta‐analysis of randomized clinical trials”.