Los cigarrillos electrónicos exponen a los usuarios a otras sustancias dañinas para la salud
Vapear es inhalar el vapor creado por un cigarrillo electrónico u otro dispositivo que utilizan pilas y tienen cartuchos llenos de un líquido que suele contener nicotina, saborizantes y sustancias químicas, al calentarse este líquido se convierte en vapor. Se ha especulado que puede o no hacer daño, sin embargo, existe evidencia científica de que la nicotina, además de ser altamente adictiva, puede afectar el desarrollo del cerebro.
En los adolescentes la nicotina puede hacer más lento el desarrollo del cerebro y afectar la memoria, la concentración, el aprendizaje, el autocontrol, la atención y el estado de ánimo, además puede aumentar el riesgo de sufrir otros tipos de adicciones en la vida adulta.
Los cigarrillos electrónicos irritan y dañan los pulmones, los niveles de nicotina que manejan algunos de estos dispositivos son similares a los de los cigarrillos. Si bien, algunos no contienen nicotina, pueden contener otras sustancias químicas que pueden generar problemas de salud en estos órganos, además de contaminar el medio ambiente.
Este vapor que se desprende del cigarrillo electrónico que congrega a muchos usuarios en espacios cerrados es una fuente importante de PM 10, nicotina de aire y compuestos orgánicos volátiles (COV), en una investigación se midieron las concentraciones en tiempo real de partículas PM 10 y los COV totales, las concentraciones de CO2 y NO2 en una convención de cigarrillos electrónicos que fomentan el uso en interiores de estos dispositivos. Se encontró que las concentraciones de PM 10 y COV totales, estaban altamente correlacionadas con las concentraciones de CO2, lo que indica una muy mala calidad en este espacio y un alto índice de personas vapeando. La concentración de nicotina en el aire fue de 125 μg/m3, equivalente a las concentraciones medidas en bares y discotecas.
En otro estudio se midieron 10 metabolitos de ácido mercaptúrico de COV en muestras de orina de 24 horas recogidas de 36 usuarios que vapearon, que hicieron uso de cigarrillos durante dos días y otros dos días de abstención forzada. Las concentraciones de metabolitos de COV fueron más altas durante el tabaquismo en comparación con el vapeo, a excepción del metabolito de los agentes metilantes.
Los cigarrillos electrónicos exponen a los usuarios a los COV, como la acrilamida, el benceno y el óxido de propileno, y pueden presentar riesgos para la salud de los usuarios que no fuman. Los COV son sustancias que se derivan de otros productos también, como pinturas, barnices, limpiadores, pegamentos, tintas, entre muchos otros, agravan síntomas pulmonares y cardíacos en adultos mayores.
¿Qué se puede hacer para abandonar este hábito?
Existen recomendaciones que pueden ayudar a disminuir la ansiedad de querer utilizar estos dispositivos que dañan su salud, la de la población en general y el medio ambiente:
- Decida por qué dese abandonar el hábito y anótelo en el teléfono o en una parte donde pueda tener acceso a éste, cuando sienta ganas de capear, vuelva a leer esos motivos.
- Marque en un calendario el día que dejará de vapear, coméntelo a familiares y amigos.
- Deshágase de todos los productos para vapear.
- Comprenda lo que implica la abstinencia, la adicción a la nicotina provoca deseos intensos de volverla a consumir y puede provocar dolores de cabeza, dificultad para dormir, hambre, inquietud, entre otros síntomas. Estos síntomas serán intensos los primeros días, pero mejorarán.
- Si siente muchas ganas de vapear masca goma de mascar sin azúcar o bebe agua.
- Visite algún amigo o realiza una actividad distractora, incluso meditación.
- Escuche su música favorita.
- Salga a caminar o correr.
- Respire profundamente 10 veces.
- Asuma el control de su salud, si le cuesta mucho trabajo dejar este hábito, hable con un profesional de la salud, existen diversos programas que pueden ayudarle.
Revisores de la información: Brenda Giselle Álvarez Rodríguez (Unidad de Investigación en Salud Pública) y Cassandra Saldaña Pineda (Unidad de Administración del Conocimiento).
Fuentes:
- Artículo: “Nicotine Gateway Effects on Adolescent Substance Use”. Michelle Ren, MS. & Shahrdad Lotfipour, PhD. West J Emerg Med. 2019 Sep; 20(5): 696–709. DOI: 10.5811/westjem.2019.7.41661
- Artículo: “Assessment of indoor air quality at an electronic cigarette (Vaping) convention”. Rui Chen, Angela Aherrera, Chineye Isichei, Pablo Olmedo, Stephanie Jarmul, Joanna E. Cohen, Ana Navas-Acien & Ana M. Rule. Journal of Exposure Science & Environmental Epidemiologyvolume 28, pages522–529 (2018).
- Artículo: “Comparison of Systemic Exposure to Toxic and/or Carcinogenic Volatile Organic Compounds (VOCs) During Vaping, Smoking, and Abstention”. Gideon St Helen, Evangelia Liakoni, Neal L Benowitz, et.al. Cancer Prev Res (Phila) 2019. DOI: 10.1158/1940-6207.CAPR-19-0356
- The Nemours Foundation.