La actividad física es particularmente protectora contra el Alzheimer
La demencia es un trastorno cerebral que afecta gravemente la capacidad de una persona de llevar a cabo sus actividades diarias. El Alzheimer (EA), es la forma más común de demencia entre las personas mayores, ésta afecta las partes del cerebro que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje. Conforme va pasando el tiempo, los síntomas de esta enfermedad empeoran, la persona puede tener dificultades para hablar, leer, escribir e incluso olvidar cómo peinarse o cepillarse los dientes.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) entre los años 2000 y 2010 la población de adultos mayores creció a una tasa anual de 3.8%. En la encuesta intercensal 2015 se contaron más de 12 millones de personas con 60 años y más, lo cual representó el 10.4% de la población total. El Alzheimer (EA) representa de 60 a 80% del total de casos reportados de demencia y aumenta de forma exponencial de los 65 a 85 años. Según datos del Informe Mundial de Alzheimer 2016, hubo alrededor de 47 millones de pacientes en todo el mundo con este tipo de demencia y se predijo que la cifra aumentaría a más de 131 millones para 2050.
El riesgo de padecer EA aumenta a medida que la persona envejece, investigadores han identificado otros factores de riesgo, tales como: antecedentes familiares, ya que si el padre, madre, hermano o hermana padecen de Alzheimer, las probabilidades de desarrollar la enfermedad aumentan; y la genética (herencia), se ha comprobado que hay genes involucrados en el desarrollo de esta afección como la apolipoproteína E-e4, o APOE-e4, el cual es el primer gen de riesgo identificado y continúa siendo el de mayor impacto.
Debido a que el Alzheimer es una enfermedad multidimensional y compleja y conlleva una gran carga económica para quienes padecen la enfermedad, sus familiares y los sistemas de atención social de la salud, investigadores han estudiado medidas de prevención, entre ellas el realizar actividad física.
En un metanálisis que tuvo como objetivo explorar si la actividad física y el ejercicio pueden ejercer efectos positivos en la cognición de los ancianos con Alzheimer, se incluyeron 13 ensayos controlados aleatorios con un tamaño de muestra de 673 sujetos diagnosticados con EA y mostraron una mejoría estadísticamente significativa en la cognición en comparación con los grupos de control.
Existe evidencia que sugiere que la actividad física y el ejercicio pueden mejorar en cierta medida el rendimiento cognitivo en pacientes con deterioro cognitivo, pero no se ha determinado qué combinaciones de frecuencia, intensidad, tiempo y tipo de ejercicio pueden ejercer un mejor resultado.
En un metanálisis previo se mostró que los deportistas aeróbicos ejercían efectos positivos sobre la función ejecutiva, Tyndall, AV et al sugiere que el ejercicio aeróbico, a través de una serie de mecanismos, tiene efectos positivos sobre los biomarcadores de sangre, la fisiología y los factores psicológicos asociados con el funcionamiento cognitivo.
Organizaciones como el Colegio Americano de Medicina Deportiva y la Asociación Americana del Corazón sugieren que los adultos mayores realicen actividad física aeróbica de intensidad moderada durante un mínimo de 30 minutos en cinco días a la semana o actividad aeróbica de intensidad vigorosa (mínimo 20 minutos) en tres días a la semana. La Organización Mundial de la Salud recomienda que las personas mayores de 65 años con una función cognitiva completa deberían adoptar un mínimo semanal de 150 min de actividad aeróbica de intensidad moderada o 75 min de actividad aeróbica de intensidad vigorosa con ejercicios adicionales de fortalecimiento muscular para reducir el riesgo de deterioro cognitivo, esto incluye a personas con enfermedad neurodegenerativa.
A pesar de los grandes hallazgos de los metanálisis mencionados, es necesario continuar investigación con ensayos controlados aleatorios de alta calidad con menos problemas metodológicos y una heterogeneidad notable para respaldar estos resultados.
Revisores de la información: Brenda Giselle Álvarez Rodríguez (Unidad de Investigación en Salud Pública) y Cassandra Saldaña Pineda (Unidad de Administración del Conocimiento).
Fuentes:
- S. National Library of Medicine
- Alzheimer’s Association
- La Enfermedad de Alzheimer y otras demencias como problema nacional de salud. Documento de postura Academia Nacional de Medicina de México: https://www.anmm.org.mx/publicaciones/ultimas_publicaciones/ANM-ALZHEIMER.pdf
- Artículo: “Effects of physical activity and exercise on the cognitive function of patients with Alzheimer disease: a meta-analysis”. BMC Geriatrics 2019. https://doi.org/10.1186/s12877-019-1175-2